Si el demonio quisiera inquietarnos con la salvación de nuestra tierra y nuestros bienes, recordemos que no podemos guardarlos por mucho tiempo. Si se nos amenaza con el exilio y la huida de nuestro país, recordemos que somos ciudadanos del mundo, y no somos como esos árboles que sólo pueden crecer en un sitio: allá donde vayamos, Dios irá con nosotros.
Santo Tomás Moro
¡¡¡Gracias Pablo!!! qué belleza empezar el día con esto. Santo Tomás (Moro) nunca defrauda. Me ha encantado: no somos como esos árboles... allá donde vayamos, Dios irá con nosotros. ¿Dónde lo has leído?
ResponderEliminarQué bien!
ResponderEliminarPues está la cita en el libro que te comenté de Scott Hahn, "Signos de Vida"